Partiendo de que mi experiencia en el mercado laboral es nula y se reduce a un puñado de vagos currículum echados sin éxito, pienso que el requisito fundamental para superar los retos de selección es la pasión por lo que haces. Es algo que suena a tópico y que, mal entendido, puede dar lugar a un simple conformismo, un pensamiento de "bueno, pues es lo que quiero hacer y con eso ya me vendrá todo por sí solo", y eso no es así. A lo que me refiero es a hacer actividades que para uno son lúdicas porque le entretienen pero que algún día serán útiles y valoradas por un sector de mercado concreto.
Por ejemplo, ya que tratamos medios de comunicación, un comentarista de fútbol que sea bueno en su trabajo lo es porque en su vida ha visto innumerables partidos por diversión, los ha analizado, ha leído largo tiempo sobre tácticas, sobre la filosofía del deporte, sobre sus tejemanejes. Un crítico musical lleva toda su vida escuchando música, y no lo hacía porque en un futuro le pudieran contratar, sino porque simplemente le gustaba. Lo que quiero decir es que para trabajar en un puesto en el que te sientas cómodo los preparativos que hagas para pasar ese filtro de selección tienen que ser un preludio ameno de lo que vas a hacer.
Ahora, enmarcado en la crisis que todo lo impregna, la paciencia se posiciona como un pilar clave para conseguir trabajo. Ya no vale con la aptitud, ahora la actitud es fundamental para lograr posicionarse. Hay que recordar que los trabajadores no son máquinas, y es lógico que cunda el desánimo ante la dificultad de encontrar un puesto de trabajo, que se incrementa cuando al encontrarlo las condiciones en ocasiones no son las esperadas y están muy por debajo de lo moralmente exigible, en cuanto a salario, horas de trabajo o condiciones laborales deseables. La reciprocidad queda dañada, además, como ilustra el artículo de El País "Si España no quiere saber nada de mí, yo tampoco quiero saber nada de España".
En lo que a mí me concierne y como ya he dibujado en el primer párrafo, mi mejor arma para encontrar trabajo es que me dedico intensamente a mis hobbys y a mantenerme informado en la medida de lo posible, y eso acaba creando cierta cultura (aunque nunca es suficiente) que puede servir para cualquier tipo de trabajo que tengas que enfrentar en el futuro. Puede que sirve o puede que no, pero al menos yo lo habré intentado y lo seguiré intentando, que es básicamente la clave.
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